Todo comienza un fin de semana en Castañares

Cuando empiezas con un nuevo cuaderno, todo en blanco, nunca sabes cómo va a avanzar con el transcurso del tiempo, y al comenzar se inicia un camino por sitios y lugares, que aunque volvamos a pasar no lo volveremos a ver como esa vez en que lo dejamos recogido en la hoja de papel.

 

El inicio del viaje de los sketches empieza con un fin de semana en Castañares de Rioja, donde fuimos muy bien recibidos por Rafa e Itxi, como siempre que nos juntamos con ellos en ese rincón.

 

El viernes arrancamos yendo a cenar a Tirgo, antes se dan una vuelta por el pueblo mientras yo tomo algo y aprovecho a estrenar la Moleskine comprada para este verano. Bajo el gran árbol, que sirve de magnifica sombra en los momentos del día donde el sol calienta, me lanzo a comenzar con la primera hoja ...

 

 

 Este es el primero que dejo en este nuevo cuaderno y representa cómo se empieza con algo que me representa un reto, pero que al mismo tiempo es un  aliciente para todos las jornadas que van a llegar durante este verano. Y sobre todo refleja un lugar muy pintoresco donde se puede cenar cosas que parecen normales, que puestas con sabiduría y regadas con un buen vino de esta buena tierra, dan una gran combinación para el paladar.

 

Por la mañana del sábado, desde la ventana del Marisa encuentro una buena vista de la iglesia del pueblo, que hace que me anime a plasmarla también, de entrada me parece que no será muy difícil pero cuando se va poniendo el sol en lo más alto se hace más difícil aguantar el calor que ni una buena cerveza alivia. Pero lo que se ve al final ha merecido la "calorina" y, sobre todo, el aperitivo posterior cuando nos juntamos todos.

  

 

Esa tarde nos vamos a ver Sajazarra, pueblo digno de ser visitado y pasear un buen rato por sus callejuelas, donde la tarde se va pasando sin casi darnos cuenta y frente al Ayuntamiento y su plaza nos tomamos un zurito antes de cenar.

  

El domingo sale un día radiante y después de desayunar en la terraza, lo de las terrazas para mí es de lo mejor que hay, estar al aire libre en días soleados pudiendo estar leyendo, oyendo música,... o ahora que estoy en esta nueva dinámica de hacer sketches, poder realizar unas notas de las vistas que tengo, me parece una gran posibilidad para empezar el domingo.

Mientras las chicas se preparan y preparan la intendencia del día, puedo tomar una notas desde la terraza, que reflejan la zona cercana más rural y todas las edificaciones del pueblo, que en la zona más cercana tienen nuevos edificios en construcción, contrastando las casas de toda la vida con las nuevas edificaciones de carácter mucho más moderno, que no quiere decir que mejor.

Y completamos la mañana con unas rabitas al aire libre también, que en estos días lo bueno es estar fuera, y mucho mejor cuando estas en una zona ajardinada y a la sombra, pudiendo valorar el contraste de estar en una remodelada casona, que hace las veces de bar, restaurante y hotel todo en uno, con las traseras de las casas de toda la vida y las cocheras, típicas aquí en Castañares, que sirven tanto para guardar un vehículo como para acondicionarlas para otros usos más lúdicos como es un txoko donde degustar buen cordero asado regado con buen vino, que bien suena y que poco lo hacemos.

Siempre es mejor y más fácil hacer planes que luego llevarlos a cabo, pero siempre es bueno tener planes en mente que poder ejecutar en el futuro próximo, es otro aliciente que tenemos para la vida urbana que llevamos, y que estas píldoras mentales nos ayudan a sobrellevar con más ilusión por las cosas que queremos hacer, y que seguro que vamos haciendo.